La higiene personal es tan importante como el comer, además
de evitar contagios, enfermedades y etc, proporciona al sujeto que lleva a cabo
dicha práctica o sea lavarse un cierto relax, placer y bienestar; vamos que
se queda uno como muy a gustito. Pero algo tan imprescindible como es baldearse
el cuerpo no todos lo llevan a cabo, y hay gente más guarra que la tetra “que
escupía en la sartén para comprobar si el aceite estaba hirviendo”, piensan que
si se lavan mucho encogen, y los hay que se rocían de spray, gel, colonias y no
sé cuántas cosas más, y esos mejunjes cuando entran en contacto con la piel sin
haberte saneado anteriormente, lo que produce en el cuerpo es una reacción
asquerosa que hasta los cochinos del matadero de Mérida, huirían despavoridos
ante un individuo que deleite al resto con semejante atrocidad. En cambio
también los hay muy pulcros que presumen de ducharse dos veces todos los días.
Pero bien vamos al caso que nos ocupa, y según cuentan ha habido numerosos
personajes célebres de la historia, que se puede decir si es cierto lo que se
les imputa que se lavaron muy poco en su vida, aunque también es probable que
alguien por celos o rencillas, se encargara de llenarlos de mugre. Pero si es
verídico entre las celebridades de guarros y guarretes, figuran una serie de
ellos que merecen mención especial. Entre ellos Carlos Marx; “el político rojo” fundador del máximo y socialismo,
este su obsesión fue repartir los bienes, pero se ve que el agua ni la repartía
ni compartía, ya que según sus biógrafos se lavaba más bien poco. Cristóbal Colón; cuentan que su
leónica cabellera estaba infectada de piojos, y miraba con horror las
costumbres de los indígenas que se lavaban todos los días. Van Gogh; de quien se dice que utilizaba sus propios excrementos
para crear obras, si es cierto este pintor lo que era un auténtico cerdo. Otro
explorador como el bueno de Colón, fue el capitán inglés James Cook; descubridor de Australia y Nueva Zelanda, y también
parece ser que muy pulcro no era. Enrique
IV de Francia; fue otro que le tuvo pavor al aseo personal, cuentan que la
noche de boda su bella esposa se desmayó antes de la consumación del matrimonio
debido al fuerte hedor que desprendía. El
rey Nicolás II; el último zar de
Rusia, fue otro de los reyes que no tuvo buenas relaciones con la limpieza. En
cuanto a damas también la hubo asquerosillas, por ejemplo de Isabel la Católica; afirman que sus
relaciones con el agua fueron escasas, ésta bastante tuvo ya diría ella, con
dedicarse a expulsar del país a moros y judíos. Rasputín; monje, aventurero y cortesano; vamos vividor de aquella época, no solo huía
de una tina, sino que cuentan que se untaba semen de animales en la barba como
una especie de fijador afrodisíaco, aunque se ve que al menda le daba
resultado, ya que a pesar de no lavarse se montaba una orgías de tres pares de
narices. Ahora habría que ver también a las hembras participantes del festejo. Carlos I de España; fue otro de armas
tomar, este pájaro certifican que no se bañó en la vida. El dictador Benito Mussolini; fue otro ilustre
marrano, que dicen que solo se lavó en su infancia, y porque lo lavaba su
madre. El gran Napoleón Bonaparte; no
solo era él quien no se bañaba, sino que obligaba a su mujer a no hacerlo
mientras él estaba en el campo de batalla, según cuentan cuando volvía de la
guerra la quería hirviendo de pasión en su estado natural y puro. Otro que
tampoco hacia buenas migas con el agua fue Ernesto
Che Guevara; el revolucionario más famoso de la historia. Decía que si se
lavaba sobre todo con agua fría sus problemas respiratorios se acentuaban
puesto que padecía de asma. Una vez dicen, aunque creo que un poco exagerado
que se apostó a que sus calzoncillos se podían quedar de pie de la roña que tenían
y ganó la apuesta. Algo de verdad habría en todo esto, cuando su segunda esposa
lo primero que hizo fue regalarle una pastilla de jabón. En fin se puede ser;
poderoso, glorioso y culto, pero por favor: “Célebres y guarretes no”. Habrá
gente que dirá que como se demuestra que esto es verídico; pues hombre al igual
que nos creemos otras muchas cosas de la historia que nos han contado, y sin
saber a ciencia cierta si son verdades o mentiras las creemos a pies juntillas.
En pleno siglo XXI, en el que casi todo el mundo tiene una ducha a mano, todavía sigue habiendo mucho guarro. Hay quien piensa que el desodorante en vez de ser "después de" es "en vez de" y así se monta lo que tú dices.
ResponderEliminarAyer precisamente hice uno de mis versos polisémicos, para la siguiente entrada, relacionado con el tema.
Un abrazo.
Muy cierto lo que cuentas, en esas épocas creo que no bañarse era algo muy común entre todos....no me puedo ni imaginar los "efluvios" que podrían desprender tanto cuerpo sin sanearse debidamente.Pero bueno he padecido durante años el "hedor" de un compañero de trabajo ( al punto de tener que llevar ambientador a mi mesa para poder respirar medianamente) que encima estaba cerca de mí y que no había quién lo aguantara, yo creo que no se lavó en su vida. Bueno el hedor lo compartíamos todos los compañeros y ya se sabe que si se comparte toca a menos y mira que se le decían indirectas bien directas pero nunca se dió por aludido.La verdad es que me ha divertido mucho esta entrada y tus comentarios pero ¡VIVAN LOS LIMPIOS Y EL AGUA CON JABÓN! Saludos cordiales
ResponderEliminarjo!! ni hablar de los españoles cuando llegaron por este lado del mapa
ResponderEliminarsi venían hasta con las armaduras encarnadas
acá se sorprendieron de que los "salvajes" se bañaran a diario ...cosa que ellos no lo hacían por temor a enfermar o morir
que la higiene no es algo propio de los desarrollados parece jajajaja
abrazos excoloniales
Antes era antes, pero ahora y desde aquí me gustaría pedirles a los fabricantes de desodorantes que no anuncien que duran 24 horas porque la gente se lo cree. Una estadística de esas que fallan mucho dice que las españolas somos de las mas limpias de Europa. Abrazos
ResponderEliminarQuien lo hubiese dicho.
ResponderEliminarBesos, buenas noches, Rafa.
La historia relata, hay que ver para creer dicen... pero que no se bañaban no es falso jajaja, muy bueno.
ResponderEliminarTengo conocimiento de que en algunos siglos, la higiene brillaba por su ausencia...lo de Isabel la Católica era célebre.
ResponderEliminarBesos
La verdad que el poderío no tiene nada que ver con la higiene personal , antes y ahora los guarretes existirán la verdad es un poco asqueroso , el agua y el jabón a nadie le hace daño .
ResponderEliminarMuy interesante gracias amigo . Un fuerte abrazo.
Bueno mi nariz, me hace distinguir entre moros y cochinos jajaja!!
ResponderEliminarLos japoneses criticaban a los europeos porque nunca se bañaban. Y los baños en las casas europeas recien hicieron su aparicion a mediados del siglo 20. Tal vez se justifica por el frio-
ResponderEliminarAbrazos
Sí, esos personajes que mencionas, hicieron su fama de muy sucios!!! A diario por amor y respeto al medio ambiente y por lo que más queramos en la vida, por nuestras mamacitas lindas que nos parieron, por piedad, que todos tenemos el derecho a respirar, jajaja,
ResponderEliminarBesos.
Fíjate que si esos que nombras se lavaban poco, como lo haría el pueblo con el que convivían. Has hablado de la Reina Católica, en su reinado el agua se usaba solo para beber, por eso expulsaron a un pueblo el musulmán que ya en el siglo XIV tenia lugares para lavarse cosa fina, los expulsamos por limpios.
ResponderEliminarSaludos
¡Agggggggggmmr!
ResponderEliminarBesos.
No se que habrá de cierto en lo que comentas, pero está claro que en otro tiempo bañarse no estaba a la orden del día.
ResponderEliminarAlgunos mayores decían que el agua quitaba el lustre´, apenas se bañaban.
En mi niñez nos metían en un barreño un día a la semana, tampoco había agua corriente en las casas.
Un abrazo.
En la Edad Media imagina como olería todo, si los grandes se lavaban poco, el pueblo solo usaría el agua para cocinar, claro que como todos olían igual, pues no conocerían los buenos olores, :))).
ResponderEliminarMuy curiosa y entretenida tu entrada Rafa.
Un abrazo.
Asquerosa lista de eses famosos tan sucios, da ganas repetir la ducha diaria !!
ResponderEliminarDecía mi abuela: "De nada sirve cambiar la braga, si no lavas el culo". Y tenía 96 años.
ResponderEliminarAlgunos debieron sentir una impresión tan grande cuando les lavó por primera vez la comadrona, que no han vuelto a tocar el agua,jejeje
Un abrazo,amigo.
Todo lo contrario que Julio César, que tenía tal aversión a la suciedad y a las enfermedades que pudiera adquirir por su culpa, que no sólo cuidaba con esmero su higiene personal, sino que se depilaba de cuerpo entero para no ofrecer refugio a parásitos indeseados.
ResponderEliminarGuarra de verdad una vecina mía que se puso un clavel en la cabeza "pa la feria" y le ha "agarrao".
ResponderEliminarSaludos.
Buenas anotaciones, muy querido amigo.
ResponderEliminarSupe de una fraternidad de épocas medievales llamada " Los caballeros de la orden del bano ", denominados asi por solo ducharse una vez cada 365 dias.
Te invito a ver en youtube la raiz de la vidas
ResponderEliminarbesos
En esas épocas no bañarse era como un sacramento...
ResponderEliminarLey hace poco, que los gitanos no dejaban que se lavasen sus mujeres, las querían con su perfume natural...¡horror!...
Con lo agusto que te quedas, como si nacieses de nuevo...
Feliz día Rafa.
Un abrazo.
Hola Rafa! Divertido, entretenido e informativo tu post. Al unico que salvo yo de todos los que nombras es a Ernesto Che Guevara, vamos, que pasarsela en los montes sin agua y comida, no debe ser ningun festin.
ResponderEliminarPor estos lados del planeta, se comenta que a los europeos poco les gusta asearse, claro, yo no meto a todos en el mismo saco pues sé que no es tan asi, sin embargo, si puedo decirte que por aca se ven muchos franceses, italianos, españoles e ingleses que vayaaaaa, mejor ni saludar.
Besos sabor a coco y piña.
Entre buen humor y seriedad histórica he pasado un buen rato leyendo tu entrada. Esos si que eran unos verdaderos cochinos, pero son cosas de costumbres.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Rafa.. Hace años la Trinca popularizó una canción,eran los años 80 y los franceses nos daban caña con las verduritas,los langostinos,nos taponaban la frontera etc..
ResponderEliminarYa entonces se decía que los franceses eran tan GUARROS que habían inventado el bidé para no tener que lavarse enteros.
Mira por donde ,esa pieza que los españolitos copiamos porque queríamos ser chic,ha resultado inservible y un trasto que poco a poco vamos desterrando de nuestra casa, mejor una duchita rápida que lavándonos solo el culito como los gatos.
El Barón del Bidet
En el siglo XVIII
en París hizo furor
el Barón del Bidet
famosísimo inventor
El Barón especulaba
con la posibilidad
de tomar baños de asiento
sin perder la dignidad.
En las fuentes de Versalles
contempló con estupor
a unos patos arrimar
el culo a un surtidor.
Y exclamó el señor Monsieur
Eureka je le encontré¡
Oh la la oh mon Dieu
je feré una filigrane
que sere una palangane
con el chorro incorporé.
Con la excusa del diseño
el Barón el muy truhán
se pegaba el gran filete
con madamme de Chatobriand
La eficacia del invento
alcanzó tal dimensión
que en la corte del gabacho
descendió la polución
Insaciable el populacho
exigía su bidet
para poderse lavar
sentado y no de pie.
Y salieron en cuadrillas
y tomaron la Bastilla
Qu'est ce que c'est ce merdé
preguntaba la nobleza
la revolución francesa
qu'est que vous avez pansé.
Se instauró en la egalité
liberté y fraternité
y en Paris no quedó
ni un trasero sin bidet
Y así gracias al Dantón
a Marat y a Robespierre
las madamas de la Francia
se lavan la pomme de terre.
Y al Barón por este invento
las naciones honrarán
Como al Conde de Foiegrass
o al Marques de Croisant
Y este es el relato exacto
del Barón y su artefacto.
Y jamás hallarán
sensación más refrescante
por detrás y por delante
por delante y por detrás..
jejeje..Un abrazo compa..
Menuda colección de marranos y marranas, ¡Puaaagggg!
ResponderEliminarAunque no tenían agua corriente en las casa, y los indios se morían de calor, no era comparable, mira ahora con agua caliente y corriente como ha mejorado la cosa, supongo, claro... :)
Salud y abrazo
Puaggggg cuanto chancho junto,abrazos.
ResponderEliminarCada vez te supera un poco mas
ResponderEliminarTe imaginas esos efluvios? Fooooooooos
ResponderEliminarMenos mal que no me tocó vivir cerca de ellos... porque si algo tengo en excelente forma es mi sentido del olfato... y claro lo hubiera pasado mal.
ResponderEliminarSaludos.
Más que guarretes...guarros!
ResponderEliminarAggggg
Besos.
L'igiene è fondamentale in tutte le cose della vita
ResponderEliminarFelice sera,silvia
Que asco, la verdad, no podría acercarme. Asqueroso vamos.
ResponderEliminarUn beso Rafa!
No lo entiendo... además de una necesidad es un placer!
ResponderEliminarUn abrazo de luz y agua
El leer nos puede hacer un poco mas grande
ResponderEliminarMe imagino que el mal olor no les llegaba a molestar como nos molesta ahora cuando se tropieza con una persona con poca higiene.
ResponderEliminarAunque fuesen celebres no por esto destacaban de las normas de aquellos tiempos.
Un feliz San Valentín.
Interesante todo esto, hay que pensar que antiguamente no había tanta facilidad para el baño y como todos olían igual de mal no les extrañaba, era como algo habitual que pululaba en el ambiente.
ResponderEliminarSi te rodeas de guarros, no distingues jejeje.
Lo que no cabe es que hoy en día haya gente que le escape a la ducha, esos no tienen disculpa.
Besos Rafa.
Puri
Con lo importante que es la higiene y oler a limpito!!.
ResponderEliminarAlgo había oído yo decir de esos cochinitos .
Muy bueno, Rafa.
Un beso
Me ha hecho mucha gracia tu articulo.
ResponderEliminarMuy bueno. Un saludo.
Excelente articulo!
ResponderEliminarTiempo sin pasar por estos lados!
Un fuerte abrazo...estoy olorosa a Jazmin jajajajaja