MIS FRASES SENTENCIAS Y OTRAS OCURRENCIAS.

El feminismo acérrimo me asusta; ya que se trata de una copia del machismo elevado al cubo.

Hay que diferenciar entre un banco de sangre, y un banco con sangre. Que los bancos nos sangran ya todo el mundo lo sabe.

Lo malo de morirse en fin de semana es que tardan más en enterrarte: te mantienen en una sala con un frío del carajo, rodeado de otros fiambres a los que no tienes el gusto de conocer, ni nadie tiene la delicadeza de presentarte.

Si hay algo que envidio es a la gente que duerme bien: yo lo he probado todo para dormir excepto las uñas de gato.  

El cura que me casó era un crack: dijo que por la ceremonia él no cobraba,  que la gente daba la voluntad y solían dar cinco mil pesetas.

No hago uso de la fuerza, y no lo hago hasta tal extremo, que cuando hay que tirar la bolsa de basura y pesa; escurro el bulto.

Hay personas que tienen un sexto sentido; yo tengo mis dudas si tengo los cinco, ya que cuando los cuento alguno siempre me falta.

La gente muy viajara se consideran ciudadanos del mundo; pero todo el mundo cuando se muere desea que sus restos descansen en su patria.  

Hay palabras en castellano tan similares o iguales que al redactarlas  puedes meter la pata hasta el corvejón como por ejemplo: erección y elección; yo por eso la primera la redacto “empinamiento”, y  la segunda que cual elija según preferencias. Otras que al escribirlas también puedes cometer un error son: libido y lívido: yo la primera en caligrafía es  “cachondo”, y la segunda; no tener humor ni para chingar.       

El estornudo  viaja a una velocidad de más de ciento diez kilómetros por segundo: esto me ha llevado a la conclusión, de que si yo estornudo desde Valencia dirección Madrid tres veces seguidas, puedo llenar de mucosidad a un turista polaco que se halle paseando por la Puerta del Sol. 

Los niños son pequeños dictadores a gran escala; y los hay tan repelentes que si no derogas sus leyes acabas siendo un juguete roto en sus manos.  

Me parece bien la gente que trabaja por el amor al arte, pero yo gratis ni  meo.

Si a alguien no le caigo bien me defrauda, porque yo me esfuerzo todo lo posible por adornarle la caída. 

Tuve una amiga a la que le contaba mis aventuras amorosas, pero me decía, que sin la puesta en escena por parte de ambos ella no se centraba.