ACOJONADOS POR LAS VAQUILLAS.

Si en la pasada Feria de San Isidro el ex-alcalde de Madrid Álvarez del Manzano se llevó un susto de cojones cuando un toro saltó la barrera y vio como el bicho se le venía encima, ahora le ha correspondido pasar el mal trago al alcalde de Zaragoza y a la colla de amiguetes políticos que le acompañaban.

Sucedió en la pasada Feria del Pilar en la cual el alcalde de la ciudad maña ejerció de torilero durante una suelta de vaquillas, “al menos en este caso no eran toros pero bueno la angustia para ellos se queda”. La mala fortuna acompañó a los concurrentes ya que a las dos reses a las que el alcalde abrió el portón saltaron el callejón poniendo en aprietos a toda la comitiva.

Las imágenes del percance son de risa ya que se ve a una pella de tíos en el ruedo, otros encima de las barreras, en fin cada uno trataba de salvar el culo como podía. El peor parado fue el teniente alcalde que quedó como un sapo tendido boca arriba en la arena.

Afortunadamente todos salieron ilesos, aunque si alguno se cagó no hay que darle vueltas que fue de miedo.