El tema de los regalos para ciertos mandatarios se está poniendo más negro que un tizón. Como se siga indagando y hurgando a más de un político se le va a ver la colita, y a más de una la cosita. Rita Barberá para quitar hierro al caso Gürtel “igual porque ya no lo ve tan claro”, afirma que todos los políticos reciben regalos, y Esperanza Aguirre dice que ella los caros los devuelve. Yo creo que en cierta medida a los ciudadanos les importa un pimiento que los políticos acepten o dejen de aceptar dádivas. Lo grave es que detrás del regalo haya un trato de favor, o se dejen sobornar, ya sea bien por un anillo Papal o una caja de plátanos.
EL HOTEL DE LOS LÍOS
Hace 15 horas
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