EL DÍA DE ACCIÓN DE GRACIAS.

PETA, la organización defensora de los derechos de los animales; esa-os que se sienten molestos y apenados hasta cuando Obama mata una mosca han vuelto a dar la nota, y hay americano que no sabe si ese día podrá comer ya que las mandíbulas las tienen desencajadas de la risa. Pasado mañana se celebra en Norteamérica el Día de Acción de Gracias, una festividad anual americana en las que las familias se reúnen a la mesa el cuarto jueves de noviembre para zamparse un pavo. Fue declarada fiesta oficial por el Senado en 1941, y aunque a través de la historia ha experimentado modificaciones se viene celebrando desde 1621, y la tradición es la de comer pavo. Ese día en Estados Unidos se consumen alrededor de 170.000 toneladas de pavo, y PETA ha mostrado los enormes escalofríos que recorren sus cuerpos al comprobar el calvario que sufren los pavos antes de ser cocinados. (Por eso sus miembros no los cocinan, y se sientan pacientemente a la mesa para disfrutar del festín cuando el pavo ya está asado) Último comunicado de prensa: Según el The New York Times ahora vienen a por la paella, ya que la sufrida organización PETA ha manifestado que echarle caracoles a la paella es llevar a cabo un genocidio, y los que osan por añadirle romero una infamia: La Generalitat Valenciana ya está en alerta. Por cierto se podían haber puesto un nombre más adecuado para la tarea que desempeñan. PETA en el argot delictivo y callejero significa porro, cigarrillo de marihuana u otras drogas