Ayer terminó la Feria de la Mercè de Barcelona, y con ella otra puerta grande más para José Tomás. El torero madrileño volvió a meterse en la chaquetilla a los 18.000 espectadores que llenaron la Monumental. Una vez más la plaza de Barcelona volvió a ser talismán para José Tomás, un coso en él que el maestro de Galapagar tiene un espejo en el cual mirarse para desparramar su arte. Se lidiaron toros de Núnez del Cuvillo y el madrileño consiguió desorejar a los dos oponentes que le tocaron en suerte. Aunque a las dos faenas les faltó limpieza ya que los engaños fueron enganchados varias veces, el madrileño volvió a pasarse los toros más cerca que nunca, y su toreo pausado encandiló al respetable. Quizás sea la última vez que se vea torear a José Tomás en la Monumental de Barcelona, ya que antes de finalizar el año y sino se producen contratiempos el Parlamento Catalán debe pronunciarse sobre el futuro de las corridas de toros en Cataluña.
UNA TARDE EN EL CIRCO
Hace 14 minutos
Ala, !que se fastidien los antitaurinos!. Salud Rafa.
ResponderEliminarIgual ahora salen por peteneras y dicen que la mitad de las entradas las regaló el torero. Saludos amigo.
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