BELLEZAS AL DESNUDO.

Posar desnudo es más viejo que la tos, aunque siempre los que han sacado tajada han sido los famosos que son los que suscitan morbo e interés. Pero desde hace ya unos años no sólo la gente popular tiene la exclusividad en esta materia, ya que cualquiera sin perjuicios y echándole morro puede mostrar sus encantos. De hecho en estas fiestas navideñas que acabamos de pasar viene siendo habitual últimamente que surjan grupos y asociaciones que se fotografían desnudos, promocionándose en calendarios del nuevo año: “el fin está muy claro”, representar su entidad y sacarse un dinerillo para mejorar la empresa que llevan a cabo, o para correrse porqué no, alguna juerga. Aunque también se dan casos que no siempre es con ánimo lucrativo, ya que en ocasiones el dinero recaudado por ciertas corporaciones o conjuntos son usados con fines benéficos. De los pioneros en posar desnudos en España a nivel colectivo creo que fueron el muy honorable Cuerpo de Bomberos como lo han hecho los bomberos (donostiarras, catalanes, ilicitanos y murcianos). Ahora como despelotarse no es novedad yo les voy a proponer a los vecinos de mi finca, que nos retratemos todos empelotas en la terraza, y nada de taparse las partes sexuales con un pañuelo manchego, ni con el escudo del equipo de fútbol ni pamplinas por el estilo”. O posa uno tal y como lo parieron o no hagas él chorras, a lo sumo admito cubrirse las partes íntimas con una hoja de perejil. Mis vecinos y yo, (a continuación ya les hablo de mí, ya que merezco mención aparte) tenemos unos cuerpos exuberantes, y de escándalo. Además la mayoría contamos con experiencia en posados ya que entre otros asuntos hemos trabajado en campañas publicitarias, por lo tanto estoy totalmente convencido de que vamos a tener un éxito arrollador. Y como les decía, si mis vecinos se las traen, mí cuerpo ya es harina de otro costal ya que tengo una percha, porte, y trapío que levanta hasta la niebla allá por donde paso, soy un ser tan sumamente bello e interesante y estoy tan bien acabado que inmortalizarme en un retrato lo veo escaso. Está feo que lo diga yo, pero empelota picada ni el mismo Apolo dios griego de la belleza podría eclipsarme. “Eso sí las cosa claras, mi equipo y yo sólo posamos en beneficio propio ya que con la pasta que saquemos y va a ser mucha, nos marcharemos el próximo verano a la Bahía del Tiburón (Australia) donde se encuentra una de las playas más paradisiacas y bellas del mundo”.