PERROS PARACAIDISTAS.

PERROS PARACAIDISTAS.   

Perros del Ejército Español son adiestrados para saltar en paracaídas. Los saltos los realizan junto a soldados guías, aunque no me extrañaría que con lo listos que estos animales son,  con el tiempo terminen por los aires ellos solo. A mí me parece fenomenal que a estos perros soldados como les llaman los conviertan en perros paracaidistas, ya que ante cualquier emergencia pueden desempeñar una gran labor; pero vamos al “meollo de la cuestión”. Si seguimos las directrices que “imponen”, los defensores de los derechos de los animales, estas prácticas se deberían considerar “maltrato animal”. Por muy bien adiestrado que esté un can, que lo lancen al vacío desde una altura de 3.500 metros, no les debe resultar muy agradable; y “ozú el miedo que deben pasar”. Lanzarse en paracaídas que lo hagan los soldados de las Fuerzas Especiales, que para eso han elegido ese trabajo, pero los perros no son “boinas verdes”, y deberían dejarlos en tierra firme realizando otras tareas.  A lo mejor las Fuerzas Armadas acaban enseñándoles a estos chuchos, a lanzar misiles, o a usar un fusil de asalto; y esto en un perro no quedaría muy elegante. Como he dicho yo lo veo correcto que a estos perros militares los amaestren  para todo, ya que está demostrado sobradamente que ante cualquier evento trágico son fundamentales en las misiones que les encomiendan, y de hecho en la Segunda Guerra Mundial ya fueron utilizados por los ejércitos; pero si los animalistas ya se han hecho eco de la noticia que resalto deberían alzar la voz, al igual que hacen con prácticas que se llevan a cabo con otros animales, y que a ellos por el mero hecho de desagradarles lo consideran “maltrato”. (Y que conste que no me estoy refiriendo en absoluto a las corridas de toros, ya que entiendo que es un tema muy susceptible y levanta gran revuelo). Pero creo que hay que ser justos y objetivos, y usar el mismo baremo en todos los casos, y no solo denunciar lo que nos interesa, y mirar hacia otro lado cuando no nos conviene meter cizaña. Pero claro; llamarle la atención a las Fuerzas Armadas ya estamos hablando de palabras mayores, y quizá falten agallas para ello por no soltar una animalada más gorda. (Para enseñar a saltar a un perro en paracaídas, se necesitarán muchas horas de trabajo y esfuerzo por “parte del perro”. Tomen buena nota de ellos los señores animalistas).