Imagen tomada de Internet.
La derecha de este país, y cuando digo la derecha, no solo me
refiero a la oposición y a los
políticos, sino como vulgarmente se dice a los ciudadanos de a pie que en
general comulgan con sus ideas, se están sirviendo, aprovechando y sacando
rédito de esta pandemia y de los muertos para despellejar vivos al Gobierno.
Que hayan cometido errores, no seré yo quien los disculpe, porque nunca he
estado afiliado a ningún partido político ni lo estaré. Pero mucha gente no
soporta que nos gobierne un partido social-comunista como muchos lo han
definido. La derecha tiene esa espina clavada, desde que los dos partidos; PSOE
y Podemos se aliaron para formar gobierno. La crisis económica que se nos
avecina va a ser brutal, y la derecha está dispuesta a usar toda la artillería
de la que dispongan para tumbarlos. La misión prioritaria desde que comenzó el
coronavirus es tratar de debilitar al Gobierno, y ahora más que nunca los
buitres carroñeros van a esperar impacientes a ver si consiguen que su presa se desmorone y comerse sus despojos. Si estos
la cagan o la han cagado, no quiero ni imaginarme si el Covid-19 le pilla
gobernando al PP con Mariano Rajoy al frente. Al menos lo que queda de año, y
en todos los sentidos va a ser muy duro, y los “fachas” ya se encargarán de
empeorarlo mucho más. Los errores que estos dirigentes cometan los adornarán
más para perjudicarlos al máximo, y lo que no se lo inventarán, con tal de meter cizaña para que este
Gobierno cuanto antes pierda fuelle. El PP apoyó el estado de alarma, pero
desde su inicio no ha estado de acuerdo ni como se aplicó el confinamiento, ni
como se está llevando a cabo la desescalada. Todo se traduce en protestas y
quejas, así que hagan lo que hagan los van a crujir. Ya solo falta y nunca es
tarde, para que algún zumbado fascista diga, que el virus lo ha importado de
China Pedro Sánchez o Pablo Iglesias que aún le tienen más asco. En cuanto al periodismo ocurre tres cuartos de
lo mismo. Los adefesios de derecha y ultraderecha meten mucha más bulla y son
más malos que cuando arremete el periodismo de izquierdas. Desde mi punto de
vista estos últimos deberían de azuzar más para que al menos en este sentido se
equilibrara la balanza. Yo si fuera Pedro
Sánchez y su Gobierno de
coalición, les recordaría a sus seguidores aquella mítica frase del Che
Guevara: “Hasta la victoria siempre”.
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