Cuando del amor se pasa a la pasión, y de la pasión a la lujuria, en cuestión de sexo el ser humano se vuelve irracional, pierde las formas, y con tal de que le apañen a uno el cuerpo es capaz de cualquier cosa, sin importarle la situación, ni el entorno ni el que dirán. Menos mal que el hombre consiguió cubrirse sus partes y a ella la tranquilizaron con una valeriana, ya que de no ser así la escena esa tan subida de tono de "El cartero siempre llama dos veces" que protagonizaron Jack Nicholson y Jessica Lange hubiese sido una simple caca, con la que se podía haberse liado entre esta pareja en los pasillos de las Corts o en el propio hemiciclo: vaya usted a saber. (Leer enlace).
Feliz Navidad
Hace 4 horas
Últimamente no sé que está pasando, se pierden las formas con mucha facilidad, ¡por algo será!
ResponderEliminarBesos, muy buena noche Rafa...
No guardan ni las formas, saludos
ResponderEliminarRafa amigo y lo que esta por venir,hay en tu terreta es demasiado ,también ,pero a!!estoy sufriendo a la COSPE
ResponderEliminarUn abrazo
En cuanto oyen decir las verdades, se crispan.
ResponderEliminarA ellos (y a ellas) les gusta sólo que les hablen de lo guapos que son, de lo bien que lo hacen, pero no soportan una crítica y si en sus manos estuviera, a quien osa plantarle cara, le mandarían a los leones directamente.
Las mujeres que tenemos un pronto, pero luego no somos nadie con una valeriana se nos arregla el cuerpo. Un abrazo
ResponderEliminarQué loba, tú. Como sea así en todo, qué miedo, nene.
ResponderEliminarUn abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
¡Ozú como está el mundo!, digo los pasillos.
ResponderEliminarBesos.
Es impresionante la rabieta de esta mujer. Si le va a denunciar por calumnias que lo haga, está en su derecho, pero que no monte el escándalo bochornoso que montó.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias a todos por los comentarios.
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