CABINAS MÓVILES PARA REZAR.

Dicen algunos que no les queda ni un minuto libre para ir a al iglesia, “joder que suerte con la de parados que hay”. Yo siempre saco ese minuto para visitar la casa de Dios, lo que me ocurre es que antes de entrar en la parroquia un diablillo que llevo dentro me echa para atrás, y algo impulsivo yo diría casi violento me hace desistir, e irremediablemente y muy a pesar mío me encamina hacia el bar más próximo a hincarme una cerveza. “Y esto me duele que nadie se lo imagina, con lo meapilas que yo he sido, y ahora no poder entrar ni en una basílica, ni en un templo ni en una catedral”. Pero bueno como lo mío es algo de fuerza mayor y excepcional, que no cunda el pánico y los que quieran rezar que no se preocupen que ya no tienen impedimento alguno para no hacerlo. En Estados Unidos han ideado un sistema de cabinas que creo que hasta se puede transportar de aquí para allá, ya que se pueden atravesar por los extremos dos palos largos por unos boquetes que se han ideado para este fin lo levantan como si fuese un santo y arrean con él Normalmente se necesitan seis tíos, pero vamos sin son “bragaos” con cuatro basta. Los hay que se los llevan hasta los puestos de perritos calientes. Por medio dólar los consumidores tienen a su servicio estas cabinas que constan de más de 300 oraciones, y están grabadas para orar en 65 idiomas. En su base de datos hay rezos para creyentes cristianos, judíos, budistas y seguidores del Islam. Estos artilugios han sido reconstruidos sobre cabinas de fotos instantáneas. Dicen que están teniendo mucho éxito en las universidades americanas, donde los estudiantes acuden a rezar para aprobar los exámenes. Yo creo que este Gobierno más siendo de ideas tan arraigadas al catolicismo y la cristiandad debería implantarlo en España, y seguro que estas capillas ambulantes en los centros comerciales y en las salas de fiestas donde se celebren despedidas de solteros tenían un éxito arrollador. En las universidades me parece que no se comerían un rosco ya que con casi un 80% que han subido las matrículas ya veremos quién estudia, porque claro se ve que como ya hay mucho listo, a las autoridades quizás no le interese que el país se cultive más. Yo creo que estas cabinas para rezar es el futuro del cristianismo, lo malo es que a lo mejor desaparecen los curas de toda la vida o por hacerles este feo y darles de lado se nos vuelven anarquistas y ateos: “Dios mío que sofoco”.