CON ESTA ENTRADA CIERRO PLAZA.

Con este post doy por finalizadas mis entradas sobre el mundo de la tauromaquia y las corridas de toros, ya que sé que es un tema que suscita polémicas y no aclara nada, porque  ni los taurinos van a convencer nunca a los antitaurinos, ni estos van a entender nunca a los amantes de la fiesta de los toros, puesto que entre las ideologías y percepciones de unos y otros dista un abismo y están condenados a no entenderse. Como he dicho al principio, en este espacio, ya no voy a hablar más sobre toros, porque tampoco es cuestión de herir la sensibilidad de nadie “Dios me libre”.  Solo quiero puntualizar algunos detalles y aportar unos datos. Yo creo y lo digo sinceramente, que los toros caerán por su propio peso, el día que los aficionados dejen de acudir a las plazas, y cuando ese dinero que les cuesta la entrada de toros, se lo gasten en “tocino de beta” se acabaron las corridas de toros,  así de sencillo y claro y sin la necesidad de prohibir nada, porque el rifirrafe entre los que quieren espectáculos taurinos y los que no lo quieren ya viene arrastrándose hace años, no se resuelve el problema y sólo hace criar mala sangre entre taurinos y no taurinos. Y ahora os voy a aportar unos datos bastante curiosos: En España hay unas 1.270 ganaderías de reses bravas que generan más de 2.500 millones de euros al año, aunque también es cierto que las ganaderías de renombre y solera de cría de toros bravos son los que se llevan más tajada. Por ejemplo en la temporada taurina de Sevilla en la plaza de la Maestranza trabajan unas 650 personas,  y los toreros, sobre todo las figuras, con el sueldo que ganan mantienen cada uno a unas doce familias; “creo que se me entiende, me  refiero entre el personal de la cuadrilla  que trabaja a su cargo y demás” Y  las personas que viven en este país gracias a los toros porque es en lo que trabajan oscilan alrededor de las 200.000. Toda esta gente que menciono, ha vivido prácticamente toda su vida del mundo del toro, y si los toros se pierden pasarían a engrosar las listas del paro. Y ya por último solo me queda añadir lo siguiente: Muchos antitaurinos, creo que no han pensado que si las corridas de toros son prohibidas algún día, el toro bravo de lidia, desaparecería; la raza se extinguiría y sería historia. El toro bravo nace y es criado única y exclusivamente para lidiarlo y darle muerte en una plaza de toros “que puede resultar duro, si; yo también puedo llegar a entenderlo” pero esa es su función. Ningún ganadero iba a criar en sus fincas toros bravos por el amor al arte, porque un toro bravo de lidia cuesta mucho dinero entre 3.500 y 5.000 euros solo alimentarlo. Vamos que los iban a criar y a mantener para  que los turistas fuesen a las dehesas a hacerles unas fotos al toro, y los niños echarles palomitas de maíz. Y ahora sí que finalizo: Por cierto que conste que con esto que voy a decir, no voy de guasa, y  mi intención no es picar ni provocar a nadie. En muchos circos ya han prohibido también el espectáculo y las atracciones de animales; digo yo que si los zoológicos no deberían también prohibirlos, ya que se trata de animales en cautiverio, y la misión y función que desempeñan es la de sacar dinero y lucrase a consta de los animales. Los cachorritos de la tigresa, el hijo del mandril y cualquier especímenes  rara que les nazca, lo harían igualmente en su hábitat natural y sobrevivirían si están sanos y morirían si enferman como lo han hecho toda la vida y no han necesitado nunca nacer ni morir en un zoo, ni cuidadores, y hasta el propio león se ha quitado siempre las lagañas él solito. Y si los niños  quieren ver como los monos se rascan el culo, que les pongan los padres un vídeo de YouTube. (En Google podéis encontrar páginas a mansalva que explican el por qué los zoos también deberían ser prohibidos, y no lo digo yo, por lo que acabo de comentar al respecto, sino que lo firman los propios activistas defensores de los animales).Con este apunte final me refiero que sí tuviéramos que prohibir todo los que nos hiere, o no nos agrada andaríamos siempre a la gresca y con las uñas afiladas.