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martes, 7 de abril de 2009

EL LUNES SANTO HUBO BUEN ROLLITO.


La última semana de vida de Jesús de Nazaret fue muy ajetreada, tuvo la agenda completa, y todo el mundo sabe el triste desenlace.

El domingo de Pascua se paseó con un borrico y una palma en la mano y acabó destrozado. Luego como es lógico llegó el lunes, y ese día según el Evangelio de San Juan: 12. 1-11 fue un buen día para Jesús ya que decidió acercarse por Betania y hacerle una visita a su amigo Lázaro.

Jesús ya se había hospedado al menos tres veces en la vivienda de este buen hombre, y por esas fechas los judíos conmemoraban la Pascua en señal del final del cautiverio de manos de los egipcios 1.250 años antes del Redentor. Por eso como eran amiguetes cuando Lázaro la cascó Jesús dijo: “algo tengo que hacer al respecto”, y decidió resucitarlo.

La cuestión es que Lázaro en señal de agradecimiento, ya que a uno no lo resucitan todos los días le preparó a Jesús una cenita, y mientras una de las hermanas Marta servía, otra hermana de Lázaro esta llamada María sacó un perfume de nardo a lo visto una cosa muy buena y carísima y le ungió a Jesús los pies; luego tiró “ parriba”, y le embadurnó su larga caballera dejando en toda la casa un olor y fragancia que llamaba la atención. Judas Iscariote que andaba en todos los fregados acompañaba a Jesús, y dijo que en lugar de desparramar aquél caro perfume de aquellas maneras se podía haber vendido por 300 denarios y repartirlo entre los pobres.

A este sinvergüenza los pobres le importaba un carajo: ya era un chorizo y se iba echando a la saca la monedas que le daban a Jesús. Entonces el muerto resucitado intervino y dijo que se le dejara a su hermana rociar el perfume ya que lo tenía para echarlo en el féretro el día que muriera. Lázaro dijo que los pobres siempre los tendrían a su lado, pero que a él no. En fin que cuando los vecinos se enteraron de que Jesús andaba por allí, y de que una gachí andaba rociando al personal con perfume acudieron a mogollón y de paso ver efectivamente que el muerto había resucitado.

Resumiendo el lunes de Pascua Jesús pasó un buen día, ya que hubo buen rollito. (Como apunte final decir que Lázaro se creía que Jesús iba a estar para revivirlo a dos por tres, pero los sacerdotes se lo ventilaron y ya no se levantó más)

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