Ya os he hablado en más de una ocasión de mi amigo el cura, y como os he
dicho alguna vez este tío es muy especial y rompe moldes ya que se salta a la
torera muchas de la memeces de la Iglesia. Su abuelo hizo la guerra en el bando
republicano, fue también sacerdote y estuvo a punto de que lo fusilaran porque
le dio dos hostias a un cabo de la Guardia Civil. Más tarde cuando terminó la
guerra, su padre escondía a los maquis en la Serranía de Cuenca, y Franco no le
cortó el pescuezo porque se casó con una falangista de cierto renombre a la que
dejó preñada en un campo de fresas. Mi amigo el cura, que no voy a revelar su
nombre para preservar su intimidad es de armas tomar y cuando se quita el alzacuellos porque en eso sigue chapado a la antigua ya que dice que le gusta que quede claro que es sacerdote ojo con él. En una de las últimas
manifestaciones de Valencia porque siempre está al lado del pueblo y de la
gente más necesitada ya que no puede ver injusticias, un madero le quiso dar un
palo, y de la hostia que le soltó lo tumbó al suelo y al policía le voló hasta
el casco. Está liado con una viuda de muy buen ver de Alicante y además con
dinero, así que este verano están planeando casarse; en secreto por supuesto.
Los casaría un hermano suyo que es alcalde en una pedanía de Logroño, que además
ejerce de veterinario sin tener la carrera, y es castrador de perros de caza.
Ya os he relatado a groso modo un poco más de la vida de mi migo el cura, pero
ya para no liarme más y no hacerlo más largo, os voy a contar lo que le pasó el
pasado fin de semana. Resulta que una asociación de damnificados del Partido
Popular, y digo lo de damnificados por los malos resultados que han obtenido en
las últimas elecciones, y no porque les haya sucedido nada afortunadamente, lo
invitaron a comer a una gran casa de campo a las afueras de Sagunto (Valencia), donde se dieron cita más de cincuenta peperos, y
como el jodido cura es un glotón de la leche, lo que se llama en toda regla un
“tumbaollas” el muy cabrito se metió entre pecho y espalda; dos platos de
paella, tres pechugas de pavo con tomate y patatas fritas, medio kilo de
cerezas, una tajada de sandía, dos flanes de huevo, dos carajillos y un puro
habano que se encendió y que no le cogía en la boca, bueno todo esto que se
zampó y no quiero que se me pase por alto, se lo engulló con barra y media de
pan y dos litros de cerveza. No sé cómo el cabrón no reventó como el
“Sangonereta” ese personaje de la obra de Vicente Blasco Ibáñez. Pero por lo
que cuentan poco le faltó. Cuando terminó de comer, y no sin trabajo, ya que apenas se podía mover, se colocó una silla y se sentó a la sombra de un pino y se lió a darle al habano, pero claro cuando todo lo que se metió en el cuerpo
empezó a fermentarle, según testigos presenciales de la comida; el puro se le
cayó de la boca, el cuerpo se le fue de medio lado y pegó el porrazo de la
silla. “Le había dado un sincope”. La gente asustada acudió inmediatamente a
socorrerlo, y tras unos minutos inconsciente volvió en sí, pero solo balbuceaba
unas palabras en latín y le temblaban mucho las patas y las orejas. Así que ante
el cariz que tomó el asunto lo montaron como pudieron en un coche, y lo
trasladaron al hospital. Tras las pruebas pertinentes y un lavado de estómago,
todo quedó en un susto para lo que le podía haber pasado, aunque bueno todavía
sigue ingresado y en observación. A mí me pillo trabajando y la noticia me la
dieron por teléfono. Ayer por la tarde fui a verlo y aunque no tenía buen color
de cara ya estaba mejor. Le habían dado una taza de caldo de Gallina Blanca,
pero decía que tenía mucha hambre, y me pidió por favor que le subiera a
escondidas una tableta de chocolate con almendras y un paquete de rosquilletas.
Yo no quería pero ante la insistencia suya así lo hice. Ahora tengo remordimientos y
he estado toda la noche sin pegar ojo, por si por mi culpa ha empeorado y
cuando vaya esta tarde me dicen que está en la UCI o algo peor; como que el
cura la haya cascado. Y esto me dolería mucho, porque hace tiempo atrás me
dijo, que si la palma antes que yo, en los últimos minutos de su vida no quiere que le den la Extremaunción ni chorradas de esas; que lo que él quiere es que
yo le cuente una fantasía sexual para irse con los ojos encendidos y una gran sonrisa lasciva en su cara. Su ilusión
es hacérselo con una china y una negra en un inmenso campo de amapolas.
LA PROMESA
Hace 8 horas
Un cura peculiar.
ResponderEliminarMe ha hecho gracia que hayas escogido esa flor como telón de fondo en tu relato.
ResponderEliminarBesos y buena semana, Rafa.
Un saludo.
....Yo te iba a decir que acabo de venir de confesarme y me han dicho que rece lo que sepa.....pero creo que hubiera sido mejor haberme confesado con tú cura.......
ResponderEliminarBesos Rafa.
...y a mi me están dando ganas de ir a confesar por haberme reído leyendote,Rafa.
ResponderEliminarUn abrazo.
Por suerte hay curas .... que llevan con dignidad el nombre
ResponderEliminarBuen día Rafa
Hay personas decentes en todos los niveles, y corruptas tambien...me ha encantado este curita, jajaja, como siempre me arrancas una sonrisa Rafa.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Desde luego...! qué amigos tienes....
ResponderEliminarCon razón hacen pareja. Ese cura y tú se llevan de a cuartos.
ResponderEliminarBeSOS
Toma ya con el curica... Glotón y vivales. Eso sí, ojalá se recupere pronto. Mis mejores deseos para él. Y tú no le des más chocolate.
ResponderEliminarUn abrazo, Rafa.
Me gusta ese curita.
ResponderEliminarQue se ponga `pronto bien.
Un beso.
al cura hay que llevarlo a terapia, tomando-té, se puede mejorar!
ResponderEliminarjajaja me has hecho reír =))))
beso
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarBueno bueno tu amigo que cosas hace. Yo casi que lo entiendo, a mi me gustaba comer mucho antes, ahora también pero no me entra y enseguida estoy como si me hubiese comido un buey como decía mi madre, y claro me da rabia comer poco de una “sentá” a poquitos como que si me animo, una raja de sandia ahora, unas poquitas patatas de sobre a la vinagreta, un yogurt de coco a media tarde , y un café con hielo al anochecer, en fin que ya me gustaría comer como tu amigo, pero no puedo, una pena.
ResponderEliminarCon respecto a sus últimas voluntades, tampoco están mal, ya le veo con esa sonrisa de pillín, acercándose a las puestas del cielo o desde corresponda, que según veo tu amigo no tiene ningún trauma para hacer ese viaje a cualquier lugar.
Espero que ya se esté recuperando, y no sufras por haberle endulzado su día de hospital, seguro que él dijo para sus adentros… Dios te bendiga hijo. Un abrazo.
Bueno bueno tu amigo que cosas hace. Yo casi que lo entiendo, a mi me gustaba comer mucho antes, ahora también pero no me entra y enseguida estoy como si me hubiese comido un buey como decía mi madre, y claro me da rabia comer poco de una “sentá” a poquitos como que si me animo, una raja de sandia ahora, unas poquitas patatas de sobre a la vinagreta, un yogurt de coco a media tarde , y un café con hielo al anochecer, en fin que ya me gustaría comer como tu amigo, pero no puedo, una pena.
ResponderEliminarCon respecto a sus últimas voluntades, tampoco están mal, ya le veo con esa sonrisa de pillín, acercándose a las puestas del cielo o desde corresponda, que según veo tu amigo no tiene ningún trauma para hacer ese viaje a cualquier lugar.
Espero que ya se esté recuperando, y no sufras por haberle endulzado su día de hospital, seguro que él dijo para sus adentros… Dios te bendiga hijo. Un abrazo.
Hola Rafa , menos mal que al final solo se quedo en un susto , pero claro , lo que el buen hombre hizo fue pegarse un buen atracón y casí le cuesta la vida , espero que se recupere pronto , ya que por propia experiencia te digo que en los hospitales , se pasa un poco de hambre , yo también soy de mucho comer .
ResponderEliminarTe deseso una feliz tarde , besos de Flor.
Rafa Muy bueno este articulo es un placer pasar por aquí Saludos
ResponderEliminarOye lo de la china y la negra no está nada mal eh...
ResponderEliminarSaludos.
Soy fan incondicional de tu amigo el cura. Estoy convencida que un tipo como él no se dejará vencer por una tabletita de chocolate.
ResponderEliminar;)
Besos!!!
Me encantan las historias de tu amigo el cura!
ResponderEliminarEspero que no te hayas cargado al cura con el chocolate
ResponderEliminar:P
Jajjaja
Besos
Joer con el curica, la orden..... qué tío, ja ja ja. Un abrazo.
ResponderEliminarJoer con el curica, la orden..... qué tío, ja ja ja. Un abrazo.
ResponderEliminarJajajajaja, eso es un cura y lo demás son tonterías.
ResponderEliminarNo he podido dejar de leerte en este tiempo, porque me lo paso pipa.
:)
Besos.
Lo mejor que el abuelo también fuera cura. Pasando la profesión de padres a hijos, como Dios manda.
ResponderEliminarBien harán los padres de las mozas de la parroquia de tu amigo en aleccionar a sus hijas con el sabio refranero: "Con los curas a oscuras nunca te quedes, que aunque lleven refajos no son mujeres".
Un abrazo.
Jajajaja, vaya el curita como las gasta, a tope el tío ¿eh?
ResponderEliminarOye, los curan así, molan.
Y ese campo de amapolas, sensualidad pura, oye.
Eres singular Rafa.
Besos.
Tengo que felicitarte por ese relato
ResponderEliminarEnhorabuena
Menudo elemento, jaja
ResponderEliminarBesos
Morirse con semejante fantasía no debe ser tan malo, lo voy a tener en cuenta... pero no con un chino, son bastante sucios.
ResponderEliminarUn abrazote, Rafa y gracias por el humor.
Vine a visitarte dejarte un fuerte besos amigo, tqm , besos desde mi brillo del mar
ResponderEliminarRafa, un placer visitar tu blog, me ha encantado... seguimos en contacto, saludos desde Uruguay
ResponderEliminarjajajaja Ese cura me cae bien, debe de ser el único....jajaja
ResponderEliminarMenuda pareja debéis de hacer... :)
A ver si escribes esas fantasías en el blog...jajaja
Salud y abrazo
Hola Rafa.. Ya vuelvo a estar aquí... Bueno, bueno, para reencontrarte, en tu ultima entrada me he quedado boquiabierto, con el relato de tu amigo el cura "rojillo". Ves como hay alcaldes de pueblecitos que lo mismo que hay curas de a pie que merecen la pena, pocos, muy pocos, pero haberlos hay-los...
ResponderEliminarY es que tener amigos que rompen moldes, y son amorales, es una gozada, y se aprende de ellos, porque te enseñan que en la vida no todo son buenas apariencias, es algo mas, es sentirse libre para hacer, pensar y decir aquello que te "rota"...
Seguro que el curita se pondrá bueno, el chocolate que le llevaste es la mejor medicina, y el caldito que se lo de al gato. !Ah!... un consejo que le has de dar es que no se case con su amiguita, que siga dándole amor divino y humano, pero cada uno en su sacristía....
Un abrazo.....
Hola amigo...
ResponderEliminarMe encanta pasar por tu blog.....
Tus relatos son geniales....Robledo dede estar feliz de tanto reirse con tus ocurrencias.
Un fuerte abrazo desde Venezuela!
Tienes un volcán en el tozueloooo !!!
ResponderEliminarMenos mal que la gula no es pecado capital ;-)
ResponderEliminarMenudo curita tienes por amigo, todo un personaje... ¿peso pesado como de 240 Kg?
Una comentarista más arriba te dice que los chinos son sucios, no sé de dónde lo habrá sacado, mira que hay gente con prejuicios....
Y una preguntita,
¿quién se va a casar? me perdí ahi.
Espero que tu amigo haya sobrevivido al chocolate con almendras.
Un abrazo
Myriam se casa el cura jajaja.
ResponderEliminarBesos.
Jajaja, es buenísimo el cura....... y el artículo también.
ResponderEliminarGracias por estos ratos tan agradables que nos haces pasar leyéndote.
Un fuerte abrazo.
Le faltó una hindú, díselo de mi parte... Y sólo por eso no tiene perdón de Dios.
ResponderEliminarSonrío.
Besos, mi querido Rafeta, y mil veces gracias por tu fidelidad y cada uno de tus comentarios y por preocuparte por mí. Eres un solete.
Cuida de esos pavos, y sobre todo de ti y de la parienta.