EL SEDUCTOR DE TOMELLOSO.

Aquí os presento al “Seductor de Tomelloso” (Ciudad Real). Un auténtico crack, todo un caballero y galán de los que ya van quedando muy pocos. Con ese cuerpo, ese palique y esa lengua no hay hembra que se le resista. Solo con verle menear la lengua ya se sabe que lo que se espere de él es ternerilla fina. Desde Tomelloso hasta los Picos de Europa, mujer que se cruza en su camino cae rendida ante tanto encanto. Es una auténtica maravilla en las artes amatorias, y capaz de complacer a varias mujeres a la vez, ya que su poderío, fuerza y destreza sexual no conoce limitaciones. Muchos medios de comunicación, y una encuesta realizada a más de siete mil mujeres, corroboran que este fenómeno de la naturaleza supera con creces al primer sex-symbol del cine mundial al mítico Rodolfo Valentino. En toda la región manchega las mujeres suspiran por  tenerlo a su lado. Solo con una de sus caricias y cuatro piquitos en la boca, la inmensa mayoría de ellas afirman que ya se podían morir tranquilas. Los hombres lo envidian, los celos les corroen, pero a su vez reconocen que ante la anatomía y figura de este dios de la belleza, es natural que las mujeres queden prendadas por este ser; por esta divinidad que una vez que la madre lo parió, se rompió el molde. Pero a pesar de ser un hombre de una belleza sobrenatural, y poseer esos dones de alguien que ha nacido para encandilar, enamorar y alegrarles el cuerpo a las mujeres, no es un hombre para nada engreído, aunque en el vídeo trate de demostrar lo contrario. El vídeo es puro marketing, por si todavía queda alguna mujer que dude y se le resista, mostrando su parte más feroz de macho bravío que sepa que si no ha caído, al final caer en la cazuela fijo que cae. Este año en la cabalgata de Reyes de Ciudad Real, quiso pasar desapercibido, y rechazó ir en una gran carroza como Rey Mago, algo que no hace falta que nadie se lo proponga, porque de Rey Mago y Príncipe de la hermosura anda más que sobrado. Desfiló en la cabalgata de simple paje, y totalmente camuflado, pero su penetrante mirada lo delataba, y cuando acabó la cabalgata, más de seis kilómetros de asfalto recalentado se convirtieron en un tupido manto de prendas femeninas. Los servicios de limpieza afirman que retiraron más de media tonelada de estas prendas entre bragas y sujetadores. No tener ni tan siquiera una fantasía sexual con esta lindeza debería ser pecado.    (No os perdías el vídeo hasta el final, porque perdérselo es perderse algo mágico).