QUISO VIOLAR A UN MAPACHE, Y LE VOLÓ MEDIO PENE.

La noticia ya tiene tiempo pero no por ello deja de ser interesante, y sobre todo porque esperemos que sirva de escarmiento o al menos que sea un toque de atención para todos aquellos marranos que intentan cepillarse a los animales. Sucedió en las frías estepas rusas, cuando un grupo de amiguetes se reunieron un fin de semana en el campo a celebrar un botellón. La edad de ellos rondaba y pasaban de los cuarenta años, vamos que para el botellón como que ya estaban un poquito talluditos. Se pusieron de vodka hasta el culo, y uno de ellos llamado Alexander Kirilov de 44 años, seguro que sería el más viejo, ya sabéis que a más viejos más calentorros le entraron unas ganas locas de meterla en caliente, y como no tenían mujeres a este capullo no se le ocurre otra cosa que cipote en mano salir al campo a cepillarse al primar animal que pillara. El tío se dio de boca con un mapache, y sable dispuesto y presto dijo: “ a éste me lo ventilo yo”, pero el sujeto no se esperaba que el mapache se defendiera como un tigre de Bengala, y le pegó un bocado que le arrancó de cuajo media picha al borracho y calenturiento ruso. No se sabe con certeza si el idiota este quería sexo oral o penetrar al mapache por el “fistro anal”, pero las consecuencias de su aberración es que se quedó con solo media minga. Los cirujanos rusos que le atendieron después de echarse unas risas dijeron que tratarían de recomponer aquella mierda de piltrafa que le quedó por cacharro pero que el cacho que se llevó el mapache en la boca que lo diera por perdido. Aunque le pudieran remendar el miembro tenían seria dudas si aquello volvería a ponerse tieso. El tío este, el Alexander, dijo que pensaba pasar un buen rato con el animal, y el que se lo pasó de puta madre fue el mapache que días más tarde lo vieron con el pedazo de porra en la boca correteando y feliz por aquellas frías estepas rusas. Yo he sacado cuentas y si el mapache le sajó cinco centímetros de verga, uno que se pierde en la anestesia, y dos centímetros fijos que se quedan enterraos con los puntos de sutura, adónde irás con esa mierda de pilila: bueno yo sí que lo sé, donde vayas harás la risa. (Jódete so capullo, y otra vez que estés borracho y salido la metes en un cactus).