Desde hace siglos se viene hablando de los Reyes Magos
de Oriente, pero nadie se acuerda casi nunca de los pobres pajes y de
las panzás de trabajar que estas criaturas se han dado. Estos
sirvientes de los reyes realizan el trabajo sucio, y desde hace
cientos de años su labor no ha sido recompensada ni apenas
reconocida, ya que ellos son los que cargan y descargan los juguetes,
dirigen a los camellos, y realizan cientos de labores para que todo
esté en orden. Así que yo quiero rendirles este pequeño homenaje,
pero es que además y para más inri, muy pocos saben que los
primeros pajes de los Reyes Magos, eran españoles, sí...si... como
lo oís, así que quiero contaros un poco de sus vidas. El paje de
Melchor nació en Mérida (Badajoz) se llamaba Carmelo y durante
quince años estuvo trabajando en el matadero pasando por cuchillo a
cerdos, hasta que un día tras adeudarle el salario de siete meses,
se enzarzó en una disputa con el capataz del matadero, y no le quedó
otra opción que tirar mano de cuchillo y rebanarle el pescuezo al
sujeto como hacía con los gorrinos. Para no acabar en la horca,
salió por patas y se refugió en Portugal. Allí permaneció una
temporada, hasta que embarcó en una galeón griego y tras un periplo
por esos mares fue a parar a la antigua Mesopotamia donde se casó
con una hebrea y tuvieron once hijos. Por medio de una prima de la
mujer que por cierto era lesbiana, conoció al rey Melchor y éste le
pidió que formase parte de su equipo. El paje que estuvo al servicio
del Gaspar nació en Burriana (Castellón) lo bautizaron con el
nombre de Isidro y era de familia adinerada, de labradores de toda la
vida, que poseían numerosos campos de naranjos y tierras de regadío.
Fue un hombre muy corpulento y trabajador infatigable, pero tenía el
defecto que le daba al vino, y cuando se emborrachaba cantaba saetas.
Su mujer que era una mala víbora no soportaba su cante, y le zurraba
de lo lindo. Cada vez que pasaba por el pueblo con los ojos morados,
la gente le preguntaba que qué le había pasado, y como le daba
miedo y vergüenza decir que había sido la bicha de su mujer, decía
que el cura del pueblo le pegaba. Hasta que un día, harto ya de que
la mujer le crujiera los riñones, ató el macho al carro y se fue
de Burriana. Llegó hasta Persia, y en una feria de ganado se tropezó
en un puesto con Gaspar que andaba de trato para comprar dos
camellos, pero el mercader, pretendía engañarlo y sacarle por los
camellos un dineral, cuando los camellos estaban muy mal de salud, ya
que uno tenía reuma, y el otro desviación de columna. Isidro se dio
cuenta del percal ya que también entendía de animales y se lo hizo
saber a Gaspar de que el mercader pretendía timarlo. Gaspar se llevó
los camellos, pero por un tercio de lo que le pedían, y se dijo
asimismo: -a otro se los colaré-. En agradecimiento le dijo a
Isidro que si quería trabajar para él, ya que además de la tarea
de estar preparando regalos varios meses al años, en palacio
necesitaba un tío fuerte como él, para que pusiese a raya a los
enanos que le recogían el algodón. El paje sirviente de Baltasar,
era de Ayamonte (Huelva), aunque éste nació allí por casualidad.
Los padres eran senegaleses y en el viaje de novios llegaron hasta
tierras onubenses, y como la madre venía a punto de parir, en
Ayamonte soltó el paquete. Pero los muy sinvergüenzas de los padres
cuando lo vieron tan negro, no lo quisieron y lo abandonaron en el
hospicio. En la casa cuna le pusieron por nombre Quique, y Quique
estuvo allí hasta que tuvo veintisiete años, pero un día la madre
superiora le dijo, que ya estaba bien de comer a la sopa boba, y de
que hiciese camino. Quique se encargaba en el hospicio de las
limpiezas domesticas, y de hacer algún que otro recado, pero a pesar
de que salía poco todavía tuvo tiempo de dejar preñás a dos
hermanas siamesas que regentaban una pescadería muy cerca de la casa
cuna. Pero la sorpresa fue que cuando las siamesas parieron, los
hijos que tuvieron eran rubio platino. Por este motivo, respiró y no
le pudieron meter mano, pero con el ultimátum que la había dado
la monja, no le quedó otra que replegar los pocos bártulos de los
que disponía y marcharse de allí. Quique se enroló con un grupo de
mercenarios y guerreó en Indonesia y Pakistán, y en las Guerras
Púnicas lo rechazaron por corto de talla, sino no deja un romano
vivo. Conoció a Baltasar en una casa de citas de Siria, y cuando
este le vio le dijo: -Coño eres negro como yo- y le pasó el brazo
por el cuello diciéndole: -Vente a trabajar conmigo, que ya estoy
harto de tener que pintar todos los años aún jodido blanco para que
me haga de negro- Esto a Quique le tocó la fibra, y sin dudarlo se
marchó con él. Y este ha sido el tributo que les rindo a aquellos
pajes y compatriotas nuestros que entregaron más de media vida en
pro de los niños, preparando paquetes y regalos, para que los niños
de medio mundo fuesen felices, porque el resto por desgracia no lo
son. Ya está bien que sean sólo los Reyes Magos los que se colmen
de honores y cuelguen medallas.
Feliz Navidad
Hace 16 minutos
GRACIAS POR VUESTRA HUELLA, QUE TERMINÉIS DE PASAR BIEN LAS FIESTAS, Y QUE LOS REYES MAGOS OS COLMEN DE REGALOS.
ResponderEliminarUN ABRAZO.
jajajajajaja Excelente, Rafa, Un verdadero tributo a los pajes de los Reyes magos que en definitiva, hacen todo el trabajo y los otros se llevan los honores!!!
ResponderEliminarFeliz Año Nuevo, y que el 2014 te traiga todo tipo de bienaventuranzas!!! y mucha creatividad, que te sienta genial.
Abrazos
Esto si que me parece creíble y no la historia oficial.
ResponderEliminarGracias por desvelarla Rafa.
Con reyes o reinas que lo pases en grande en 2014 !
ResponderEliminarTienes razón .
ResponderEliminarUn beso.
Se lo merecen, gracias por acordarte de ellos, un abrazo
ResponderEliminarjajaja eres genial mi Rafa.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo amigo.
Carlos.
Yo siempre me río con tus publicaciones pero con esta no voy a parar en todo el día.
ResponderEliminarLa enlazaré a mi lateral hasta un día después de la festividad de los reyes ja ja ja. Muy bien Rafa, debes seguir explotando este género literario, se te da de perlas y es un estilo poco aprovechado en las letras hispanas.
Abrazos!!!
Rafa, qué bonito homenaje.
ResponderEliminarYa está bien que otros se lleven los honores, quien vale, vale.
Besos
Mecachislamar, que historiones!!
ResponderEliminarTienes toda la razón, no pensamos en los pajes para nada, gracias a ti los conocemos mejor y los tendremos en cuenta. Besicos.
Bonita historia.
ResponderEliminarComo veo que tienes mano con ellos, pregúntales que hay por fin de la burra y el buey.
Un abrazo, Rafa.
Muy bueno Rafa, los pobres pajes también tienen derecho a su minuto de fama. ¡Ya era hora que alguien los reivindicara!
ResponderEliminarGenial esta entrada, divertida y con mucha imaginación.
Al de Mérida creo que lo conozco, soy casi paisano suyo...:)
Y lo de la columna desviada del camello, impagable...jajajaja
Abrazos y que no decaiga el humor en el nuevo año. Al menos eso no nos lo van a poder quitar.
Yo al paje del negro ya le veía un poco suelto, pero no tanto como para andar preñando siamesas.
ResponderEliminaren fin, que con semejantes subalternos se entiende que pidas lo que pidas te van a traer lo que les de la gana.
JAJAJAJAJAJAJAJAJAAJA, NO RAFA, ESOS MANES ERAN COLOMBIANOS. JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA. FULLL TU IRONÍA.
ResponderEliminarUN ABRAZO
Todas las mentiras repetidas millones de veces se combirtieron en Dogmas
ResponderEliminarPero al final siguen siendo eso,mentiras
GRACIAS A TODOS, OS LO AGRADEZCO DE VERDAD. SI HE CONSEGUIDO HACEROS SONREÍR ME DOY POR SATISFECHO. CON LOS TIEMPOS QUE CORREN, SI YA PERDEMOS EL HUMOR, NOS ACABAN COMIENDO.
ResponderEliminarUN ABRAZO.
ajajajjajaaajjaja es tan cierto eso tan cierto que eso a dia de hoy no ha cambiado nada nada nada jajajajaa, te lo digo porque hace años que trabajé en la consejalía de Fiestas uuffffffff a mi me toco muchas veces y varios años estar jajajaja recogiendo ahi todos eramos pajes jajajajaj y ellos de lo lindo montado en los camello sen la cabalgat la madre que los pario jajajaja ni fuerza chico para un whisky jaja los termine odiando el carnaval y reyes no quiero saber mas nunca nada de eso jajajaj noi sabes como he reido jajaja anda que tú mil besos desde mi brillo del mar que te dejen mucho
ResponderEliminarQueridísimo Rafa, venía tan cansada, paso a saludarte y no sólo me levantaste el ánimo, sino que me hiciste soltar una alegres carcajadas.
ResponderEliminarTu imaginación por lo grotesco y casi surreal, es enorme... Te armaste tres historias increíbles y reivindicaste a los que trabajan para los Reyes, que son los que se llevan siempre todos los laureles.
Te felicito.
Un abrazo de corazón.
No se les aprecia por culpa del sindicato de pajes, que distrae sus cuotas en langostinos y orgías varias. Lo sé de buena tinta.
ResponderEliminarMuy buena tu versión de la historia de los reyes magos, original y bastante ingeniosa, saludos.
ResponderEliminarMira tu de lo que se entera uno, no sabía que los Reyes Magos tuvieran pajes, es más pensé que todo era un invento, que no existieron ni nada.
ResponderEliminarBeso Rafa
Lo he leído ahora, que anoche lo vi, y me dije: qué largo¡ lo dejo para mañana.
ResponderEliminarMuy buena entrada,Rafa.
Bss y que los magos, te dejen algo de regalo
Eres un crack.
ResponderEliminarMe quedo con Quique...
Y sí, que el humor no nos falte.
Besos, Rafa.
Jajajajaja buenísima historia. Con tu homenaje te has librado del carbón fijo.. :)
ResponderEliminarSaludos
Buena entrada, un homenaje simpático y divertido, Rafa, ya sabía yo que eras bueno para las Tontás, tienes mucha imaginación y creatividad y eso hay que aprovecharlo, no lo dudes.
ResponderEliminarBesos apretaos.
Era el "sotanas" el que tenía poseída a la mujer que era una santa.
ResponderEliminarJajajaa, de Burriana a Persia en un pis pás, mira que me he reído.
Un abrazo y felices reyes, por aquí ya vino el gordo de rojo.
Vaya, el segundo paje, Isidro, era de La Plana y yo sin enterarme...
ResponderEliminarGracias por tus lecciones de historia, hace falta más cultura en este país y gracias a ti el nivel sube :)
¡¡Un abrazo!!
Rafa Atrayente información buen comienzo de año
ResponderEliminarSaludos desde Creatividad e imaginación fotos de José Ramón
Pues la verdad, que la historia que cuentas es más creíble que otras que oímos por ahí...
ResponderEliminarDivertida y simpática.
Abrazos.
Me gusta más tu versión alternativa.
ResponderEliminarMuy currada.
Suerte con los regalos!
Un beso.
Déjate de chorradas, pareces un niño, no te has enterado todavía que los Reyes y los pajes son los mismos, ¡¡crece hombre, crece!!.
ResponderEliminarUn abrazo y un mejor año
Un saludo Rafa, feliz día de reyes.
ResponderEliminarCuando puedas, pásate por mi blog. Gracias y un saludo.
ResponderEliminarTodo podría ser...por qué no?
ResponderEliminarMe gustó la creatividad.
Abrazos y feliz año.
¡Jajaja! Me has regalado la primera risa del día de reyes que no es poco. Más largo el relato de lo que nos tienes habituados, pero se me ha hecho corto. Muy solidario con los de abajo, con el pueblo llano.
ResponderEliminar¡Feliz día de Reyes!
por eso acá no se hacen estas fiestas, eso de andar de servidumbre no se estila desde la Independencia de la corona española jajajaj
ResponderEliminarlo que si se recuerda es la Pascua de los Negros
en épocas de la colonia, los misericordiosos españoles dejaban que sus esclavos negros en el día de reyes tuviesen un día para "descansar" , era su forma colonial de expiar los malos tratos y culpas de conciencia jajaja
ya ves la historia siempre tiene sus sabrosos cotilleos de pasillo jajaja
abrazos
Como suele ocorrir,las mentiras se hacen verdades,pero de esos mitos siempre hay sectores de la sociedad
ResponderEliminarcapaz de sacarle rendimieto
Eres un humorista
Saludos
jajjajajajja que post más alucinante, eso si que es historia verdadera jajjaja. Besos.
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